Cristianos de todo el mundo celebran la Pascua en sagrada asamblea para honrar la victoria de Cristo sobre la muerte (Mateo 28:1-15). Somos salvos gracias a un Evangelio que nos dice que Jesús murió en la Cruz por nuestros pecados y resucitó de entre los muertos. Abrazar este mensaje por la fe es lo que nos salva. La sangre que Jesús derramó en la cruz del Calvario, la sangre que goteó de Sus manos, pies y cabeza es el bien más preciado en la historia de la humanidad. Jesucristo ha comprado, al precio de grandes sufrimientos, la salvación, la liberación, la sanidad y todas las bendiciones de Dios.

Una cosa debemos tener en mente: Satanás habla de nuestro pasado porque es la única información que tiene sobre nosotros, mientras que Jesús habla de nuestro futuro.

Él ha venido a poner fin a nuestro pasado y a darnos una vida nueva, plena y libre. ¡Imagina una vida libre de culpa, miedo, condenación, complejo de inferioridad! ¡Qué vida tan bendecida!.

Romanos 6:4 – «Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.»

Cuando hablamos de la resurrección de nuestro Señor Jesucristo, estamos hablando de la excepcional oportunidad que Él ha dado a todos los creyentes de experimentar un nuevo comienzo; una situación en la que cada área muerta de nuestras vidas recibe una nueva vida.

Estamos muertos a nuestro pasado y vivos para nuestro futuro. El poder del pecado sobre nosotros ha sido roto y ahora nos revestimos de la nueva vida de Cristo: en Él vivimos, en Él nos movemos y en Él tenemos nuestro ser. Este es el significado de la resurrección.

En esta Pascua, sé liberado a una nueva vida,  ¡la agenda de Dios! Permite que el poder de la resurrección, de la Pascua, fluya en tu vida, ¡en una nueva vida!

Permite que la vida de Cristo, la vida abundante comience a fluir en tu vida espiritual, vida emocional, vida física ¡en el nombre de Jesús!

DIOS PRIMERO

Aprendamos de David, que estaba dispuesto a ser humillado ante sus propios ojos para que Dios fuera honrado. Pregúntate a ti mismo: ¿Qué lugar ocupa honrar a Dios en tu lista de prioridades? ¿Le das gracias por todo lo que ha hecho en tu vida, a lo largo de todo el camino? Mientras que los hombres miran el exterior, Dios mira los motivos del corazón. En lugar de preocuparte por la opinión de los demás sobre ti, deja que el motivo de tu corazón cada día sea honrar a Dios antes que a ti mismo.

EL SACRIFICIO DE JUSTICIA

No hay un tiempo para hacer lo que es correcto. Debemos disponer nuestro corazón para obedecer la Palabra de Dios, todo el tiempo. El estilo de vida de Dios nos llama a hacer lo que es correcto a los ojos de Dios en todo tiempo, aunque sea contrario a lo que por naturaleza queremos hacer. Elegir hacer lo correcto es una gran prueba para nuestra carne.

¿Qu¿Qué es el sacrificio de justicia? Elegir hacer la voluntad de Dios en lugar de la nuestra. Cuando nuestra carne dice odio, Dios dice amor. Se necesita amor sacrificial para amar a tu enemigo y orar por él. Estas son las armas de la justicia. Este es el sacrificio que Jesús mira y recompensa. Aunque no sea un sacrificio grande o en el exterior, es lo que Jesús valora.

EL SEÑOR HA AHUYENTADO A TU ENEMIGO

¿Cuántos de nosotros, como la gente de la ciudad moribunda, azotada por el hambre, nos rendimos al miedo, a la desesperación y nos resistimos a salir cuando Dios ha ahuyentado a nuestro enemigo? El miedo puede paralizarnos y atormentarnos, y robarnos las oportunidades de la vida. ¿Cuántos minutos, horas, días, semanas, meses e incluso años hemos desperdiciado por culpa del miedo?