Categoría: Permanece en Él

LA VOZ DE TU PADRE

«Como hijo de Dios, debes escuchar lo que Él dice, y Dios, tu padre siempre está diciendo algo.
En tu quebrantamiento, Él habla consuelo.
En tu prueba, Él habla con valentía.
En tu debilidad, Él habla fuerza.
En tu culpa, Él habla perdón.
En tu tormenta, Él habla paz.
Tu circunstancia de hoy puede señalarte la muerte, pero la Palabra de Dios te señala la vida».

EL OJO DE DIOS

«¿Pasas desapercibido? ¿Te ignoran? ¿Crees que nadie te ve? Los ojos de Dios recorren la tierra para encontrar a aquellos cuyos corazones le son fieles. (2 Crónicas 16:9) Alguien te está observando. A Jesús le importas porque Jesús te ve. Así que no te desanimes. Permíteme animarte: Las oraciones por muchos años no se pierden, el perdón que muestras, la bondad que siembras, la perseverancia y resistencia que agracian tu vida volverán a ti cien veces más en el tiempo señalado por Dios porque Dios te está observando y Él nunca olvida».

EL DIOS DE LOS DÉBILES

Si David hubiera igualado a Goliat en su encuentro, fuerza por fuerza, armadura por armadura, estatura por estatura, ¿dónde estaría la gloria de Dios en la victoria? (1 Samuel 17)
Pregúntate, ¿existen muchos soldados en tu vida? ¿Atribuyes lo bueno a tu propio esfuerzo o permites que la fuerza de Dios se manifieste en tus debilidades? A menudo, Dios actúa a través de las dificultades de la vida para hacernos depender no de la fuerza natural, sino únicamente de Dios.

UN CANAL DE DIOS

Si la atención de Pablo y Silas se hubiera centrado en su injusto encarcelamiento, cuando el terremoto sacudió la prisión y soltó sus cadenas, habrían escapado al instante. Pero en lugar de eso, su alabanza dirigió su enfoque hacia Dios y se convirtieron en un canal de bendición, de profecía y de salvación para los prisioneros y para el carcelero y toda su familia. La meditación cambia nuestro enfoque y la fe hace que las cosas sucedan. La meditación cambia nuestro enfoque de lo natural hacia la presencia de Dios.

ANDA EN SUS CAMINOS

«Pregúntate a ti mismo: ¿Quieres ser conocido solo como alguien que recibió los milagros de Dios, que trabajó por la causa de Dios o que anduvo en Sus caminos? Muchos quieren trabajar para Jesús pero pocos están listos para ser Sus amigos. Para ser Su amigo, tienes que andar en Sus caminos. ¿Cómo conocemos Sus caminos? A través de Su Palabra, por Su Espíritu».

UN CAMINO

«A Dios le tomó una noche liberar físicamente a los israelitas tras 400 años de cautiverio, pero a ellos les tomó 40 años liberar sus corazones del cautiverio, sin embargo, algunos nunca lo liberaron. Puede que hayas dejado tus malos hábitos en el exterior, pero ¿los desea aun tu corazón? Si has decidido seguir a Jesús y lo dices en serio, ¡no mires atrás! Mira sólo a Dios. No puedes descubrir nuevos océanos si no pierdes de vista la orilla».