«¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz,
para dejar de compadecerse del hijo de su vientre?
Aunque olvide ella,
yo nunca me olvidaré de ti.
He aqui que en las palmas de las manos». Isaías 49:15-16
Isaías 49:15-16
Dios siempre quiere estar involucrado en nuestras vidas como lo hacen las madres. Él quiere estar involucrado en todos los aspectos de nuestras vidas, pero es muy común para nosotros, a medida que crecemos, creer que, con la inteligencia, habilidad, recursos que tenemos, con la posición que ocupamos, podemos hacerlo todo solos y gradualmente, comenzamos a olvidarnos de Dios en nuestra vida diaria. Que triste es solo ver a Dios como tu Dios Soberano, y no como un niño ve a su padre, y a su madre.